Nunca le digas esto a una mamá que trabaja

Hay cosas que la gente no debe decirle a una mamá que trabaja. 
Conoce estas expresiones y evítalas.
Nunca le digas esto a una mamá que trabaja

Las mamás que trabajamos tenemos 2 cuestiones qué superar: primero, que no debemos sentirnos culpables por encargar a nuestros hijos a otra persona para poder laborar; y dos,  soportar ser cuestionadas por tomar esta decisión. Y es que hay cosas que la gente no debe  decirle a una mamá que trabaja.

Si conoces a una mamá trabajadora, evita cuestionarla con las siguientes expresiones. O si tú eres mamá y te han dicho este tipo de cosas, seguramente te reconocerás:

“Seguro tu vida es muy fácil”

El que una mamá pueda trabajar, no significa que su vida personal esté solucionada. El que podamos laborar significa que hemos hecho todo un plan estratégico de organización para poder cuidar a nuestra familia y ayudar económicamente en el hogar.

“Si querías progresar en lo laboral, no debiste tener hijos”

Mucha gente nos cree incapaces de ser mamás trabajadoras. Muchas hemos demostrado que podemos crecer en el terreno profesional y ser buenas madres.

Y cómo sabes que estará bien en la guardería?”

Traducción: “¿no sabes que no hay mejor lugar para un hijo que con su madre?” Y aunque sea cierto, nadie tiene el derecho a cuestionártelo. Posiblemente alguien intente tacharte de irresponsable, pero está en ti no permitírselo.

“Te vas a perder momentos importantes en la vida de tu hijo”

Como mamás, creemos que cada pasito que den nuestros hijos es único y especial, y se nos parte el corazón cuando pensamos que nos estamos perdiendo esas cosas. Pero no significa que te estás perdiendo de lo mejor: hay momentos muy valiosos que podrás disfrutar si sabes priorizar sin remordimientos.

Tu esposo debería ganar más dinero, así no necesitarían guardería”

Las mamás que trabajamos no sólo lo hacemos por estabilidad económica, sino por crecimiento personal, y tenemos todo el derecho a hacerlo. Y nadie, en absoluto, tiene por qué cuestionar la situación económica y las decisiones de tu hogar.

¿Te han dicho alguna de estas expresiones? No dejes que te detengan. Recuerda: tus hijos son la motivación más grande que puedes tener para seguir creciendo como persona. Sigue adelante con mucho entusiasmo.


FUENTE: REVISTA PADRES E HIJOS

¿Por qué mi bebé tiene sus piernas arqueadas?

Conoce por qué los bebés tienen esta condición en sus piernas y
qué sucede cuando crecen.
¿Por qué mi bebé tiene sus piernas arqueadas?


Los bebés nacen con las piernas arqueadas debido a su posición en el útero, así que es normal que tu bebé tenga este arco. A esta edad, se para con los tobillos juntos y los pies apuntando hacia adelante, por lo que sus rodillas no se tocarán.

En general, esta condición no necesita ningún tratamiento, pero en algunos pocos casos donde la curva es severa cuando crece, se recurre a una cirugía para corregirla, debido a que a la fecha no existen zapatos ortopédicos que ayuden a su tratamiento.


Conforme crece tu bebé y sus piernas vayan soportando su peso, comenzarán a enderezarse. De hecho, este arco suele desaparecer para los 3 años de edad, y a los 7 u 8 años las piernas de tu hijo probablemente ya tendrán el ángulo que mantendrán en la edad adulta.

Recuerda que si tu pequeño se para y sus tobillos se tocan pero sus rodillas no se tocan, tiene las piernas arqueadas. Si se para y sus rodillas se tocan, pero sus tobillos no se tocan, es patizambo. Esta es una esta condición se nota más entre los 3 y los 6 años, pero como sucede con las piernas arqueadas, suele corregirse por sí sola. 


FUENTE: Padres e hijos









7 IDEAS PARA GANARSE LA CONFIANZA DE LOS HIJOS



Foto: THINKSTOCK 


La amistad y la relación de confianza de los padres con los hijos jóvenes no se consigue poniéndonos a su nivel. Un buen padre puede ser un buen amigo de su hijo sin menoscabo de su autoridad, aunque sea distinto el vocabulario, el modo de vestir o los modales que utilizamos. Cuando los padres pretenden hacerse "amiguetes" de su hijo, se produce una situación grotesca y desprestigiadora para ellos.
Los padres deben evitar ponerse a la altura de los amigos de sus hijos, ya que esta actitud puede terminar con la pérdida del respeto natural que el joven les debe por ser sus padres. No olvidemos que los jóvenes no buscan en sus padres un "colega", sino un amigo con experiencia y autoridad en quien poder confiar.

7 ideas para ganarse la confianza de los hijos

1. Da el primer paso. Nunca es tarde, aunque sí será más difícil cuanto más nos retrasemos, para conseguir la confianza de nuestros hijos. Los padres tenemos que decidirnos para dar el primer paso.
2. Valora lo que le importa. Párate a pensar qué conoces de tu hijo, de sus intereses y proyectos, de lo que valora por encima de todo. Es importante para poder conversar con él y realizar actividades juntos que consoliden nuestra  confianza y amistad.
3. Preocúpate por sus cosas. Debes poder hablar con tu hijo o hija joven de cualquier tema y sin reproches por delante. Aconséjale sin censurar. Está deseando, aunque no lo diga, que se preocupen por él.
4. Respeta su intimidad. No intentes sacar a tu hijo sus confidencias a base de interrogatorios.
5. Date a conocer. Cuenta a tu hijo, de vez en cuando, algo personal acerca de tus ideas, tus proyectos de futuro (profesionales o no), de tus alegrías o tristezas, para lograr intimar con él. Le conocerás y tendrás su confianza cuando él te conozca a ti.
6. Entrégate cuando te necesite. Tu hijo ha de ver en ti alguien en quien poder confiar siempre. Recuérdaselo de vez en cuando, pero sobre todo procura estar preparado para cuando realmente necesite confiar en ti.
7. Pide su opinión en algún asunto serio. Presta atención a su consejo y extrae consecuencias de él. Después, mantenle al tanto de cómo van las cosas, en qué aplicaste lo que dijo, etc. Será una forma de demostrarle que confías en él.

Teresa Pereda
DE REVISTA HACER FAMILIA